Amiga.

Cuida a esa amiga que alguna vez cuando pierdas el norte te lleve de juerga a un garito del sur. Que no tenga prisa si necesitas ir despacio, que sea capaz de acelerar por las dos, que lleve gasolina de sobra por si aprieta la reserva y baile contigo en todos los atascos. Que siempre tenga algo que recordar de lo que hicisteis en el pasado. Que vuele en nombre de tus alas y llore contigo si no hay más remedio. Que esté siempre a prueba de selfie. Cuida a esa amiga que no sabe esconderse, escaparse ni huir de tus locuras. Que las comparte. Que las quiere. Que no la asusta nada porque conoce perfectamente cada salto que sabe que vas a atreverte a dar. Que lo niegue todo y se arriesgue. Que comparta. Que discuta. Que viva intensamente. Cuida a esa amiga; es una pequeña maravillosa parte de lo que siempre querrás ver en el espejo cuando te mires.

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